
El inyector de combustible es un componente principal del motor diésel y es una pieza de alta precisión. Durante su uso, suelen presentarse fallas como obstrucciones, atascamiento de la válvula de aguja y fallos en el sellado. Esto se manifiesta como una combustión incompleta, aumento del nivel de aceite, pérdida de potencia y acumulación excesiva de carbonilla. A continuación, se analiza la solución de problemas comunes.
1. Fugas en la unión del inyector y la culata
Si hay carbonilla en el orificio de instalación, la arandela de cobre está dañada o se utilizan materiales inadecuados (como asbesto), se producirá una mala disipación de calor y fugas. Al instalar, limpie la carbonilla y use arandelas de cobre planas.
Nota: Instale la arandela con el lado cóncavo hacia abajo y apriete según el par de torsión especificado para evitar deformaciones.
2. Atascamiento de la válvula de aguja
Causas principales:
(1) Instalación incorrecta que causa sobrecalentamiento.
(2) Falta de limpieza regular o ajuste de presión incorrecto.
(3) Impurezas o agua en el diésel.
(4) Mal sellado del cono de la válvula.
(5) Temperatura excesiva del motor.
Si la aguja se atasca abierta, el diésel no se atomiza, causando humo negro. Si se atasca cerrada, la alta presión puede dañar el émbolo de la bomba.
Reparación: Si la aguja está atascada, puede intentar limpiarla y esmerilarla con aceite. Si no sale, hierva la tobera en diésel y extráigala en caliente. Si está dañada, reemplace el conjunto de la tobera (par de aguja). Las toberas nuevas deben hervirse en diésel a 80-100°C para eliminar el aceite antioxidante.
3. Desgaste del inyector
El desgaste ocurre en la cara de sellado, el orificio de inyección y la guía de la aguja.
El desgaste de la cara de sellado causa goteo. Repare esmerilando con pasta abrasiva fina. Si falla la prueba de rendimiento, reemplace la pieza.
El agrandamiento del orificio de inyección reduce la presión. Generalmente requiere el reemplazo de la tobera.
4. Bloqueo del orificio de inyección
Causas: Largos periodos sin uso o impurezas en el combustible.
El bloqueo aumenta la presión y causa golpeteo.
Reparación: Desmonte el inyector y limpie el orificio con un alambre de acero fino o una aguja de limpieza, asegurándose de no romper el alambre dentro.
5. Presión de inyección demasiado alta o baja
Alta: Aguja atascada, resorte muy tenso u orificios tapados.
Baja: Desgaste, tornillo de ajuste flojo o resorte roto.
Una presión incorrecta causa inestabilidad y humo negro. El mantenimiento regular y el análisis de fallas son esenciales para prolongar la vida útil del inyector.
